La luz es una idea está escrito con las fibras de un presente continuo. Un ahora que se nos muestra en toda su complejidad, con capas y capas de realidad que le dan relieve, superficie y fondo, espejos, ecos. Un poemario que es a la vez una mirilla por donde contemplar la existencia, pero también un posicionamiento frente al devenir de los asuntos humanos cada vez más alarmante.